ORIGEN DE LA VIDA

EVOLUCIÓN QUIMICA Y CELULAR

ORIGEN DEL SISTEMA SOLAR :  TEORÍA DEL BIG BANG

Hay evidencias de que hace diez mil o veinte mil millones de años el Universo se hallaba en una fase de caos original estallando en una gran explosión o “Big Bang“. La información sobre las condiciones físicas del Universo primitivo la podemos obtener de la construcción de modelos matemáticos y de la búsqueda de vestigios cosmológicos.





La hipótesis actual es que nuestro Universo se inició con alteraciones de diferentes tamaños y que procesos complejos seleccionaron y favorecieron el desarrollo de las que tenían dimensiones galácticas más típicas. 


TEORÍA DEL  ORIGEN INORGÁNICO DE LA VIDA 

La teoría de Oparin preveía una serie de reacciones químicas que él creía que podían lograr que una célula compleja se construyera a sí misma, gradualmente y de modo naturalista, a base de precursores químicos simples.

En la primera fase de la evolución química, Oparin propuso que los gases simples como el amonio, el metano, el vapor de agua, el dióxido de carbono y el hidrógeno habrían existido en contacto con los océanos primitivos y con compuestos metálicos surgidos del núcleo terrestre. Con ayuda de la radiación ultravioleta del sol, las reacciones subsiguientes habrían producido compuestos hidrocarbonatos ricos en energía. Sucesivamente, ellos se habrían combinado y recombinado con varios compuestos para dar lugar a aminoácidos, azúcares y otros “bloques de construcción” de moléculas complejas, como son las proteínas necesarias para las células vivientes. Estos componentes se habrían ordenado finalmente a sí mismos por azar para dar sistemas metabólicos primitivos dentro de recintos cerrados similares a las células que Oparin denominó coacervados. Oparin propuso una especie de competición darwiniana por la supervivencia entre estos coacervados. Aquellos que, por azar, desarrollaran moléculas y procesos metabólicos crecientemente complejos habrían sobrevivido para crecer más compleja y eficientemente. Aquellos que no lo hicieran se habrían disuelto. Así, Oparin invocó la supervivencia diferencial o selección natural como el mecanismo por el que se preservan sucesos crecientemente complejos, ayudando presuntamente así a vencer los problemas que suscitaban las hipótesis puramente aleatorias.